jueves, 10 de marzo de 2011

Destierro

Aún recuerdo vagamente de la lecciones de Historia que mis profesores trataron de imbuir en mi cerebro en mis años escolares.
Se hablaba en algunos episodios, de un infame castigo infligido a los traidores, que consistía en enviarles al espantoso "destierro".
Quizá algún desorden mental (la locura es lo que tiene) o bien algún leve brote disléxico, provocaban en mi cabeza la asociación entre destierro y desierto, con lo cual, para mí todos los personajes históricos condenados al destierro debían estar, según mi (i)lógica, en el desierto.
Casi me da un vuelco el corazón cuando me contaron que un señor (al que le debía doler siempre la tripa) y que había conquistado media Europa, fue desterrado nada más y nada menos que a una isla!! Y todo por perder una batalla.


Con los años, he aprendido que destierros hay muchos, y muy variados. Los motivos para ser desterrado también son de lo más variopintos. En ocasiones (veo muertos) ni siquiera hay motivos...

A vueltas con la giliética (que diría mi camarada Hades) nos encontramos con un inmenso poder sobre el regazo, que gracias a los momentos de lucidez, no utilizamos con fines de lucro en exclusiva, permitiendo que la mezquindad obtenga indignos trofeos que lucir en su chimenea de fuego bajo.


4 comentarios:

  1. ¿Quién quiere trofeos de plastilina?. Me quedo con la senda recta, perfilada de altos árboles que aun regados con giliética, no olvidemos que estiran sus ramas al cielo. Porque los muertos en ocasiones se ven, pero mejor verlos que serlo.

    ResponderEliminar
  2. Jooo, que no solo son de plastilina. A veces llevan un poco alkil por encima, para que brillen.

    ResponderEliminar
  3. Ya estamos a vueltas con el brillo.
    ¿Qué será lo siguiente?. ¿Hacer un buzón para cartas falsas?

    ResponderEliminar
  4. Cartas falsas!!!
    Qué buena idea...

    Aunque hablando con sinceridad. Ya no recuerdo ni dónde ni a quién, pero hace mucho tiempo escuché la siguiente frase "si no tienes nada bueno que decir, mejor no digas nada" y oye, que me lo tomé al pie de la letra...

    ResponderEliminar

Enajénate conmigo